7.30.2007

Y si fuera mía?

Hace días tropecé con una estrella, no alcancé a darme un golpe, pero si una de esas sorpresas que te mueven. Sólo estaba sentado contemplando la puesta de sol en el mar, la luz se iba, el sol acababa su jornada y entraba la noche, a media luz asomó ella, brillante como pocas veces he visto una estrella, solitaria en el firmamento y para mejor, al parecer, nadie la veía como yo, todos lograban verla, pero no veían nada especial en ella..era una estrella más.
Mucho tiempo me tuvo abstraído, muchos minutos pasaron y eramos sólo ella y yo, mi estrella y todo lo que invadía mi cabeza. Lograba sonreir sin saber por qué, pero después entendí que junto a mi estrella me sentí más acompañado que nunca, pocas veces me había sentido tan comprendido como ese día. Sentía que todo lo que pensaba estaba bien, que no estoy tan equivocado y que estoy siguiendo el camino correcto.
Por mi cabeza pasaban los acordes de las canciones que me acompañan por estos días, y ella...bailaba conmigo y éramos cómplices, las sonrisas aparecían con mayor frecuencia y para el asombro de los demás, yo estaba "solo". No había nada tangible que el resto pudiera identificar a mi lado como para provocar todas aquellas sonrisas.
Más entendía que éramos ella y yo, ella estaba ahí para mi..y yo dentro del vértigo de la ciudad también me permitía estar para ella.
Hasta ahí pensaba que sería sólo ese momento y después debería volver a mi realidad, pero los hechos cambiaron mi parecer. Una semana después, de vuelta al mismo lugar, a la misma hora y con ganas de encontrarla de nuevo....me sorprendió de nuevo, no tuve necesidad de buscarla, ya estaba ahí.
No se si me estaba esperando o ya la invité en mi inconsciente, pero estaba ahí y volví a sonreir..repetidas veces sonreí, por segunda vez me sentí en confianza y me abstraí, volvieron los acordes y el baile comenzó.
Otra vez dejé de sentirme sólo y el cielo me daba una oportunidad...muchas respuestas pendientes dejaron de serlas...aparecieron las respuestas y sonreí.
Que simple parece todo...me basta mi estrella y la música, porque esa estrella ya es parte de mi, las preguntas avanzan en sintonía de las respuestas que encuentro.
¿Y si fuera mía?..creo que si, es más, estoy convencido que si, hasta el momento nadie ha venido a reclamarla y por otra parte, siento que también ella quiere quedarse conmigo.

7.16.2007

A un click de distancia

Así de simple. A un click de distancia. A veces así funciona la vida, sin más ni menos.
Tantas caras vemos por la virtualidad que nos presenta internet, cuantas de ellas pueden ser falsas o una versión mejorada y arreglada de cado uno de aquellos que se esconden entre las capas de la red. En cambio hay otras que parecen pasar desapercibidas y no son más que otra fuente de realidad que aparece para nutrirnos y aprender....a confiar en este medio....a conocernos más...a entender que no existen fronteras ni límites de ningún tipo, que a veces nos parecemos tanto que da miedo...nos encontramos de frente con la verdad, aquella que dice que no somos tan diferentes, que quizás nuestras experiencias se repiten y comparten en otras latitudes, que tenemos una historia que nos une.
Llega el momento en que más encima, todo cambió, la vida se empieza a escribir de otra manera, ese otro tan desconocido, pero a su vez con historias tan conocidas, ya es parte de la propia, no se puede dejar fuera ni omitir..existe, está ahí y no sabes como se vaya presentando ésta nueva historia.
Seguimos avanzando, claro está, pero quizás con un motivo más para sonreir, una historia que ilumina tu rostro al entender que no se está tan sólo, que hay otros que portan la misma bandera y son cómplices de los pasos que vamos dando, a veces incluso sin darnos cuenta que existen.
A un click de distancia y logras afectar otra vida, tal como la propia, se afectan mutuamente y sin darnos cuenta invadimos y permitimos serlo.
No me refiero a que esto sea malo, al contrario, como todo, siempre te puedes sorprender y sacarle provecho a la tecnología para abrir las puertas a nuevas sonrisas, nuevos rostros, nuevas historias, nuevas risas y que quizás, en nuestro entorno inmediato es difícil de conseguir.
Ayer una amiga me decía que esto le daba la posibilidad de "aprender de su vida a través de otra, de reconocerse y reinventarse" a través de la vida de otro. Es un camino que se abre en este proceso de autodefinirse e identificarse.
Ya que vuelvo al inicio, por más parecidos que nos pensemos que somos, cada uno es distinto, cada uno aporta un grano más a la diversidad, podemos compartir mil y una historias, pero somos únicos, somos complementarios.

A un click de distancia y hay quienes que leen esto también les propone un sentido que comparten...
A un click de distancia y alguien te regala una canción que interpreta parte de ti...
A un click de distancia y logras ser un compañero...
A un click de distancia y todo lo que nos separa desaparece...
A un click de distancia y te encuentras en ojos extranjeros...
Un click y la vida ya cambió.